Las autoridades iraníes deportaron el miércoles a Eddie Romero, un sacerdote de California del Sur, EE.UU. Romero había llegado a Irán a través de Turquía, con un grupo turístico, el pasado 14 de octubre. El lunes apareció frente la prisión de Evin, en Teherán, gritando "Dejen a mi gente irse" en persa para protestar contra la reclusión de cuatro misioneros y un abogado de derechos humanos. Fue detenido y encarcelado antes de ser escoltado hacia el aeropuerto 24 horas después.